Calle 13 se lleva el premio a Mejor Canción de Múscia Urbana. Foto: Reuters.
La isla de Puerto Rico, fue una de las protagonistas en los Premios Grammy Latinos
2017, mediante la música y los mensajes solidarios hacia ese territorio
con estatus colonial, tras el desastroso paso del huracán María.Durante la ceremonia celebrada anoche en el teatro MGM Grand Garden Arena de la ciudad estadounidense de Las Vegas, además de la entrega de lauros y las actuaciones de reconocidos artistas, sobresalieron la defensa de los derechos de los inmigrantes y las muestras de apoyo a la isla.
En el momento inicial del espectáculo de tres horas hubo un minuto de silencio para recordar a las víctimas de los desastres naturales que golpearon en los últimos meses a México, Texas, Puerto Rico y otros lugares del Caribe.
Tras ese homenaje solemne, la primera actuación de la noche estuvo a cargo del boricua René Pérez, el Residente de Calle 13, quien dedicó a su tierra el tema Hijos del cañaveral.
“Aquí la mayoría de los músicos son puertorriqueños y muchos de ellos lo perdieron todo en la isla, pero vinieron con todo el corazón y con toda la fuerza a decirle al mundo que Puerto Rico no se levanta, porque siempre ha estado de pie”, expresó el artista, quien ganó dos Grammy en esta edición.
También boricua es el artista más laureado de la noche, Luis Fonsi, quien con su popular Despacito conquistó cuatro gramófonos, entre ellos el de Canción y Grabación del Año.
“Esto es para Puerto Rico. ¡Qué viva Puerto Rico!”, afirmó el intérprete y compositor, cuando además agradeció a su familia, a la Academia Latina de la Grabación, al cantante Daddy Yankee y a la coautora Erika Ender.
Fonsi fue el encargado de cerrar el espectáculo con el tema que este año llegó a colocarse en el primer lugar de las listas de éxitos de más de 40 países, y para ello estuvo acompañado por el grupo colombiano Bomba Estéreo, el estadounidense Diplo y su compatriota Víctor Manuelle.